KRUPNIK Y LAS BONDADES DE LA SIMPLICIDAD

En Enero de 2001 conocí a una persona que iba a cambiar mi vida de manera radical, a alguien que me conquisto desde el primer momento en que la vi, una persona única que hasta el día de hoy me ha enseñado que lo mejor que uno puede hacer es disfrutar de las cosas simples de la vida.

Todo empezó cuando fui enviado a representar al Consulado General de México a una reunión de la Barra de Colegios Católicos en Toronto. Mi misión era hacer presencia en una de las Asociaciones de Colegios más importantes de aquella ciudad. A dicho evento se dieron cita diplomáticos de otros países, académicos y miembros de otras Barras de Colegios de la ciudad de Toronto.

Debo confesar que al final de dicho evento me encontraba merodeando solo y degustando de buenos vinos y bocadillos que habían ofrecido para los invitados, fue ahí donde se me acerco una chica bastante interesante, alta, rubia, con un delicioso toque intelectual que le daban sus lentes y con unos modales impecables.

Se presento ante mí y me dijo que ella trabajaba para la Barra de Colegios Católicos y que era parte de la Comitiva de recibimiento, empezamos a conversar de una manera franca y bastante relajada, ella me comento que acababa de regresar de mi país ya que su hermana había estado en el Tec de Monterrey de Mazatlán estudiando por 6 meses.

Me sorprendió por la gran cantidad de ciudades que visito y por lo emocionada que sonaba cuando hablaba de sus experiencias en México, sinceramente sentí que conecte con ella desde el primer momento en que se me acerco.

Obtuve sus datos y posteriormente establecimos comunicación y empezamos a salir, ese tiempo que estuvimos juntos pude descubrir a una persona muy especial, que tiene una forma muy distinta de ver la vida, alguien con una idea clara de la persona con la que quiere estar.

Krupnik me ha enseñado que lo más importante en la vida radica en lo más simple, en lo más sencillo, ella me ha enseñado a disfrutar cada momento, cada segundo, cada experiencia.

Como mencione al principio, mi vida cambio a partir de que la conocí, ella me enseñó lo simple que puede ser disfrutar el amor, una caricia, hacer la cena, viajar, el silencio, el sonido de la lluvia, el ver una película, el despertar, el reír, el besar, el leer, el divagar, el encontrarme a mi mismo, el ser yo, el creer en mi, el darme la oportunidad de conocer profundamente a alguien…. A final de cuentas ella me ha enseñado que en la vida lo mas importante son las cosas mas simples.